lunes, 17 de octubre de 2016

5- Las emociones inútiles: Culpabilidad y Preocupación


Si tú crees que sentirte mal o preocuparte lo suficiente cambiará un hecho pasado o futuro, quiere decir que resides en otro planeta con un diferente sistema de realidad.

A lo largo de la vida, las dos emociones más inútiles son la culpabilidad por lo que se ha hecho y la preocupación por lo que se podría hacer. Son los grandes despilfarros: la preocupación y la culpabilidad; la culpabilidad y preocupación.

Al examinar estas dos zonas erróneas, te irás dando cuenta de lo conectadas que están; en realidad pueden ser vistas como los extremos opuestos de la misma zona.

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Culpabilidad (Pasado)                                                                    (Futuro) Preocupación



La culpabilidad quiere decir que despilfarras tus momentos presentes al estar inmovilizado a causa de un comportamiento pasado, mientras que la preocupación es el mecanismo que te mantiene inmovilizado ahora por algo que está en el futuro y que a menudo es algo sobre lo que no tienes ningún control.

No es la experiencia del día de hoy lo que vuelve locos a los hombres. Es el remordimiento por algo que sucedió ayer, y el miedo a lo que nos pueda traer el mañana.

Es fácil ver ejemplos de culpabilidad y preocupación en todas partes, prácticamente en todas las personas que encontramos a nuestro paso.

Si tienes zonas extensas de culpa y preocupación, hay que exterminarlas, limpiarlas y esterilizarlas para siempre.

Hay dos días en la semana que nunca me preocupan. Dos días despreocupados, mantenidos religiosamente libres de miedos y temores. Uno de esos días es ayer... y el otro día que no me preocupa es mañana.

1)     Examinando la culpabilidad con más atención

¿Por qué has recibido los mensajes de preocupación y culpabilidad que te han echado encima todos estos años? En gran parte porque se considera "incorrecto" que no te sientas culpable, e "inhumano" que no te preocupes.

Todo está relacionado con la IMPORTANCIA que le des a los problemas. Si realmente te importa una persona o cosa, demuestras este interés sintiéndote culpable por las cosas terribles que has hecho al respecto, o dando muestras visibles de que su futuro te preocupa.

La culpabilidad es, de todas las zonas erróneas de comportamiento, la más inútil.

¿Por qué? Porque, por definición, te estás sintiendo inmovilizado en el presente por algo que ya pasó. Y no existe culpabilidad por grande que sea, que pueda cambiar la historia.

2)     La diferencia entre la culpabilidad y la posibilidad de aprender las lecciones del pasado.

La culpabilidad es la inmovilización del momento presente en aras de un suceso del pasado.

Si simplemente estás aprendiendo lecciones de tu pasado, y prometiéndote evitar la repetición de algún comportamiento específico, eso no se llama culpa.

Experimentas culpabilidad sólo cuando este sentimiento te impide actuar ahora porque antes te comportaste de una cierta manera.

Aprender de tus equivocaciones es una parte sana y necesaria de tu crecimiento y desarrollo. La culpabilidad es malsana porque gastas inútilmente tu energía en el presente sintiéndote molesto y deprimido a causa de un acontecimiento ya histórico.

Y eso es tan inútil como malsano. No hay culpabilidad por grande que sea, que pueda resolver un solo problema.

3)     Los orígenes de la culpabilidad

Son dos las formas básicas que toma la culpabilidad para convertirse en parte integrante del mecanismo emotivo de un individuo.

1-     La culpabilidad aprendida a muy temprana edad, o culpa residual, que queda como un residuo infantil en la personalidad adulta.

  • Esta culpa es la reacción emocional que la gente lleva consigo desde sus memorias infantiles.
  • Estos productores de culpa son numerosos y si funcionan en el caso de los niños, la gente mayor sigue cargando con ellos en su edad adulta.
  • Algunos de estos residuos implican amonestaciones como las siguientes:
    • "Papá no te va a querer si haces eso otra vez."
    • "Deberías sentirte avergonzado por lo que has hecho.," (Como si eso te fuera a ayudar.)
    • "Bueno, muy bien, a fin de cuentas, yo sólo soy tu madre."
  • Este tipo de frases pueden seguir con vigencia cuando desagradas a tu jefe o a otras personas que sirven como imágenes paternales y maternales.
  • El intento persistente de lograr el apoyo de estas figuras está presente y en consecuencia, lo mismo sucede con la culpa cuando los esfuerzos fracasan.
  • La culpa residual también aflora en el sexo y en el matrimonio.
    • Es fácil verlo en los múltiples remordimientos y en las excusas por comportamientos pasados.
  • Estas reacciones de culpa se producen porque en la infancia el niño aprende a ser manipulado por los adultos y estas mismas reacciones pueden seguir funcionando en el hombre que ha dejado de ser niño para convertirse en adulto.


2-     La culpabilidad autoimpuesta por un adulto después de infringir un código al que se suscribe.

  • Cubre una zona mucho más molesta.
  • Aquí el individuo se siente inmovilizado por cosas que ha hecho recientemente pero que no tienen necesariamente que estar conectadas con algo que pasó en su infancia.
  • Es la culpabilidad impuesta por sí mismo cuando se infringe una norma adulta o un código moral adulto.
  • Entre las culpas autoimpuestas más típicas están:
    • La de haber reñido con alguien y luego detestarse por haberlo hecho
    • El sentirse emocionalmente nulo debido a algo que se ha hecho como haberse ido sin pagar en un negocio, no haber asistido a la iglesia, o haber dicho algo indebido.
  • De este modo, puedes considerar la culpa como una reacción a residuos de normas que te fueron impuestas y por las que aún estás tratando de complacer a alguna ausente figura de autoridad.
  • Puedes seguir lamentándote hasta el fin de tus días, pensando en lo malo que has sido, y lo culpable que te sientes, y ni la más pequeña tajada de culpa podrá hacer algo para rectificar ese comportamiento. Se acabó.
Tu culpabilidad es una tentativa de cambiar la historia, de desear que las cosas no fueran como son. Pero la historia es así y tú no puedes hacer nada al respecto.
  • Lo que debes hacer es empezar a cambiar tu actitud respecto a las cosas que te producen culpa.
En nuestra cultura hay muchas venas de pensamiento puritano que nos envían mensajes de este calibre: "Si te diviertes, tendrías que sentirte culpable por ello".
  • Puedes aprender a disfrutar del placer sin sentirte culpable.
Puedes aprender a verte a ti mismo como una persona que es capaz de hacer cualquier cosa integrada en su propio sistema de valores sin perjudicar a los demás. Y hacerlo sin sentir culpa.
  • Si haces algo y te disgustas contigo mismo luego de haberlo hecho, puedes proponerte evitar ese tipo de comportamiento en el futuro.
  • La culpa puede servir de retribución en sí misma y también de permiso para repetir el mismo comportamiento.
Mientras retengas la posibilidad de retribución que significa el absolverte a ti mismo por medio de la culpabilidad, podrás seguir dando vueltas como un burro atado a la noria sin lograr nada a no ser la infelicidad del momento presente.

4)     Típicas categorías y reacciones productoras de culpa.

1-     Culpa filial en niños de todas las edades.

  • El tipo de mentalidad de "Yo me sacrifiqué por ti", es un productor de culpa sumamente eficiente.
  • Aquí el padre o la madre pueden recordar los momentos difíciles cuando sacrificaron su propia felicidad a fin de que tú tuvieras algo.
  • La culpa sexual impuesta por los padres es muy común.
    • Todos los pensamientos o comportamientos sexuales son como campos fértiles para el cultivo de la culpa.
      • "Dios no permita que te masturbes. Eso es malo.,"
  • Por medio de la culpa te pueden manipular para que adoptes la actitud sexual apropiada.
    • "Debería darte vergüenza leer esas revistas. Ni siquiera deberías tener esos pensamientos."

2-     Culpa relacionada al cónyuge o amante.

  • La culpabilidad por el "Si tú me quisieras," es una de las maneras eficaces de manipular a un amante. Esta táctica es particularmente útil cuando uno quiere castigar a su pareja por algo que ha hecho.
  • Cada vez que alguien no está a la altura de lo que se espera de él se puede usar la culpa para hacerlo volver al redil. Tiene que sentirse culpable de no amar al otro.
  • Los resentimientos, los silencios pronunciados y las miradas doloridas son métodos muy útiles para provocar la culpa en los demás.
    • "Yo no te voy a hablar, así aprenderás.
    • "Ni te me acerques ¿cómo pretendes que te quiera después de lo que has hecho?"
    • Esta es una táctica muy usada en los casos en que uno de los amantes empieza a descarriarse.
  • A menudo, años después de ocurrido un incidente, uno de los cónyuges se lo recuerda al otro para ayudarlo a escoger la culpa del momento presente.
    • "No te olvides de lo que hiciste en 1951.
    • "¿ Cómo puedo tener confianza en ti cuando me fallaste entonces?"
    • De esta manera uno de los miembros de la pareja puede manipular el presente del otro refiriéndose al pasado.
    • Si uno de ellos ha logrado finalmente olvidarlo, el otro puede recordárselo periódicamente y así mantener al día sus sentimientos de culpa por comportamientos pasados.
  • La culpa es muy útil para conseguir que el partenaire en el amor se adapte a las demandas y normas del otro.
    • "Si tuvieras algo de sentido de responsabilidad, me hubieras llamado."
    • "Ésta es la tercera vez que he tenido que vaciar la basura, me imagino que simplemente te niegas a hacer tu parte”
    • ¿La meta? El fin de todo esto? Lograr que uno haga lo que quiere el otro.
    • ¿El método? La culpabilidad.

3-     Culpa inspirada por los niños

El juego de la culpabilidad filial puede ser invertido. La culpa es una calle de dos vías y los niños son tan capaces de usarla para manipular a sus padres como ellos a sus hijos.

  • Si un niño se da cuenta de que sus padres no pueden soportar el verlo sufrir y que se sienten culpables de ser malos padres, el niño usará a menudo esta culpa para manipularlos.
  • Los niños, por supuesto, aprenden a usar este comportamiento destinado a producir sentimientos de culpabilidad en sus padres al observar cómo los adultos en su mundo lo usan para conseguir las cosas que ellos quieren.
  • La culpa no es una manera natural de comportarse. Es una reacción emocional aprendida que sólo puede ser usada si la víctima le muestra al explotador que es vulnerable a ella.

4-     Culpa inspirada por el colegio

  • Los maestros son originadores superlativos de culpabilidad, y los niños, ya que son muy sugestionables, son también muy fáciles de manipular.
  • A menudo se usa la culpabilidad en los colegios para hacer que los niños aprendan ciertas cosas o se comporten de una manera especial. Y recuerda que aunque seas una persona mayor aún sigues siendo un producto de esos colegios.

5-     Otras instituciones causantes de culpabilidad.

  • Las prisiones: La mayor parte de las prisiones operan sobre la teoría de la culpabilidad.
    • Si una persona pasa bastante tiempo pensando en lo malo que ha sido, gracias a la culpa llegará a ser una persona mejor.
      • Quédate encerrado en la cárcel y sufre lo que has hecho.
      • Este procedimiento es tan caro e inútil que resulta difícil, casi imposible, explicarlo con lógica.
      • Por el contrario, fomentan una repetición del delito al amargar al preso.
  • Las propinas: En nuestra sociedad, la práctica de dar propina ha venido a reflejar, no que el servicio o la atención es de buena calidad, sino el grado de culpabilidad de la persona beneficiaria del servicio.
    • Los camareros y camareras eficientes, los chóferes de taxi, botones y otros empleados domésticos se han dado cuenta de que la mayoría de la gente no puede enfrentarse con el sentimiento de culpabilidad que les produce el no comportarse correctamente, y que darán la propina establecida sin que esto tenga relación alguna con la calidad del servicio recibido.
    • Así pues el gesto ostentoso de la mano estirada, los comentarios desagradables y las miradas intencionadas están destinados a producir un sentimiento de culpabilidad y seguidamente, lo más rápido posible, la gran propina.
  • El ser desordenado, el fumar y otros comportamientos inaceptables por el estilo pueden ser motivos de culpa.
    • Si por ejemplo dejaste caer un cigarrillo o un vaso de papel, la mirada severa de un extraño puede sumirte en paroxismos de culpabilidad por haberte comportado de una manera torpe.
    • En vez de sentirte culpable por algo que ya hiciste, ¿por qué no decides más bien no volver a comportarte de una manera antisocial o torpe?
  • Los regímenes para adelgazar o dejar de fumar, son una actividad cargada de culpa.
    • El que está haciendo dieta, se come un caramelo y se siente culpable todo un día recordando su debilidad de un momento.
    • El sentirse culpable y lleno de autorreproches es una pérdida de tiempo, pues si te sientes así durante mucho tiempo es muy probable que volverás a comer en exceso como una manera neurótica de salirte de tu dilema.
6-     La culpabilidad en las relaciones sexuales.

  • Quizás el sexo sea la actividad que más culpa produce en nuestra sociedad.
  • Mucha gente no quiere reconocer que disfrutan con ciertas prácticas sexuales y se sienten culpables de sólo pensar en ello.
  • Las fantasías sexuales son también productoras muy eficientes de culpa.
    • Muchas personas se sienten incómodas por tener tales pensamientos y niegan su existencia en privado.
  • En efecto, si yo tuviese que localizar un centro para la culpabilidad en el cuerpo humano, lo pondría en el sexo.

5)     Las retribuciones psicológicas de la elección de la culpabilidad

He aquí las razones más básicas para escoger el desperdiciar tu presente sintiéndote culpable por cosas que hiciste o dejaste de hacer en el pasado.

  • Si absorbes tus momentos presentes sintiéndote culpable por algo que ya sucedió, no tendrás que emplear tu momento actual en actividades eficientes y provechosas.
    • La culpa es una técnica de evasión que sirve para impedir que trabajes por ti mismo y en ti mismo en el momento presente.
  • Al trasladar tu responsabilidad hacia atrás, no sólo evitas el trabajo pesado que significa cambiarte a ti mismo ahora, sino también los riesgos que acompañan dicho cambio.
    • Es más fácil inmovilizarse con sentimientos de culpa por los sucesos del pasado que emprender la senda llena de riesgos que lleva a crecer y desarrollarse en el presente.
  • Existe la tendencia a creer que si te sientes lo suficientemente culpable, a la larga quedarás exonerado de tu mal comportamiento.
  • La culpabilidad puede ser el medio de volver a la seguridad de la niñez.
    • Un período cómodo en el que otros tomaban las decisiones en tu nombre y se ocupaban de ti.
    • Una vez más la retribución radica en sentirse protegido del peligro de hacerte cargo de tu propia vida.
  • La culpa es una manera muy útil de transferir la responsabilidad de tu comportamiento hacia los demás.
    • Es fácil enfurecerse con los demás por la manera en que te manipulan, y trasladar el enfoque de la culpa de ti mismo hacia esas otras personas terribles que son tan poderosas que pueden hacerte sentir lo que quieran, incluso culpable.
  • A menudo puedes ganarte la aprobación de la gente, incluso cuando está de acuerdo con tu conducta, simplemente sintiendo culpa por ese comportamiento.
    • Puedes haber hecho algo que transgreda las normas establecidas, pero al sentirte culpable estás demostrando que sabes muy bien cómo debes comportarte y que estás haciendo lo posible por adaptarte.
  • La culpa es una espléndida manera de ganarse la compasión de la gente.
    • En este caso prefieres que los demás sientan pena por ti en vez de amarte y respetarte a ti mismo.

La culpa, como todas las emociones autoanulantes, es una elección, algo que puedes controlar.

Si no te gusta y prefieres deshacerte de ella para quedarte completamente "libre de culpa" he aquí algunas estrategias que te servirán para borrar por completo el pizarrón de tu culpa.

6)     Algunas estrategias para eliminar la culpabilidad

1)     Empieza a mirar el pasado como algo que jamás puede modificarse, sientas lo que sientas respecto a él. ¡Se acabó!

  • Y cualquiera que sea la culpa que escojas, no te servirá para cambiar el pasado.
  • "Mi sentimiento de culpabilidad no cambiará el pasado ni hará que yo sea una persona mejor".

2)     Pregúntate a ti mismo lo que estás evitando en el presente por culpa del pasado. Eliminarás la necesidad de la culpa.

3)     Empieza a aceptar en ti mismo cosas que tú has escogido pero que le pueden disgustar a cierta gente.

  • Así, si tus padres, jefe, vecinos, o incluso tu cónyuge, toman una posición contraria a la tuya en algo puedes pensar que es muy natural, acuérdate lo que dijimos anteriormente respecto a la búsqueda de aprobación.
  • Cuando logres no necesitar aprobación, desaparecerá la culpa que puedes sentir por el comportamiento que no obtiene la aprobación de los demás.

4)     Escribe un diario de culpas y apunta todas las ocasiones en que te sientes culpable, anotando cuidadosamente por qué, cuándo y con quién sucede y lo que estás perdiendo en el presente al angustiarte por el pasado.

  • El diario te podrá dar sin duda algunas percepciones internas de tu zona de particular culpabilidad.

5)     Reconsidera tu sistema de valores. ¿Cuáles son los valores que realmente aceptas y cuáles los que solamente finges aceptar?

  • Haz una lista de todos estos valores falsos y decide vivir según un código ético determinado por ti mismo y no por uno impuesto por otra gente.

6)     Haz una lista de todas las maldades que has hecho en tu vida.

  • Imponte clasificaciones de culpa para cada una en una escala de valores que vaya del uno al diez. Suma los resultados y constata si hoy te importa que la diferencia sea de cien o un millón. El momento presente sigue siendo el mismo y toda tu culpabilidad no es más que una actividad desperdiciada.

7)     Evalúa las verdaderas consecuencias de tu comportamiento.

  • En vez de buscar sentimientos místicos para determinar las afirmaciones y las negaciones en tu vida, determina tú mismo si los resultados de tus actos han sido agradables y productivos para ti.

8)     Trata de enseñarle a las personas que tienen que ver con tu vida y que tratan de manipularte por medio de la culpa de que tú eres muy capaz de enfrentarte con las desilusiones que les provoque tu comportamiento.

  • El resultado tardará en llegar pero el comportamiento de aquella gente empezará a cambiar cuando vean que no te pueden forzar a sentirte culpable.
  • Una vez que logres desconectar la culpa, la posibilidad de manipularte y de controlarte emocionalmente habrá desaparecido para siempre.

9)     Haz algo que sabes muy bien que te hará sentir culpable.

  • Tómate una semana para estar sólo como siempre has querido hacerlo, a pesar de las protestas culpabilizantes de los demás miembros de la familia.
  • Este tipo de comportamiento te ayudará a enfrentarte con la culpa omnipresente que tantos sectores de nuestro entorno te ayudan a elegir con tanta eficiencia.
10)  Cuando alguien trate de hacerte sentir culpable:

  • Contesta haciendo referencia a esa persona responsabilizándola por sus propios sentimientos.
  • Al decir "Tú sientes" en vez de "Yo siento" se disminuye el potencial de culpa con mucho tino.

La culpabilidad en nuestra cultura es una herramienta útil para manipular a los demás y una inútil pérdida de tiempo.

La preocupación, la otra cara de la moneda, es desde el punto de vista del diagnóstico, idéntica a la culpa, pero está enfocada exclusivamente hacia el futuro y a todas las cosas terribles que podrían llegar a suceder.

7)     Observaciones respecto a la preocupación

  • ¡No hay de qué preocuparse! ¡Absolutamente nada! Puedes pasarte el resto de tu vida, empezando ahora mismo, preocupado por el futuro, y por mucho que te preocupes, no cambiarás nada.
  • Recuerda que la preocupación ha sido definida como el sentimiento que te inmoviliza en el presente por cosas que pueden llegar a suceder en el futuro.
  • La preocupación es endémica en nuestra cultura. Casi todo el mundo pierde una increíble cantidad de momentos presentes preocupándose por el futuro. Y todo ello no sirve para nada. Ni un solo momento de preocupación logrará mejorar las cosas. Peor aún, es muy posible que la preocupación anule tu eficacia en el presente.
  • Una vez más todo empieza con la falacia de parangonar la preocupación con el amor.
  • Más aún, la preocupación no tiene nada que ver con el amor, que debe ser una relación en la que cada persona tiene el derecho de ser lo que elige ser, sin condiciones impuestas por la otra persona.
  • Cuando la tierra esté poblada por un personal completamente diferente, ¿crees que alguno de tus momentos de preocupación habrán logrado cambiar algo, hacer que algo sea distinto a lo que fue? No.
¿Y alguno de esos momentos de preocupación hacen que las cosas sean distintas hoy en día, en el sentido de cambiar las cosas que te preocupan?
Otra vez, no.
  • Gran parte de tu preocupación se refiere a cosas sobre las que no tienes absolutamente ningún control.  Además, la catástrofe que tanto te preocupa a menudo resulta ser menos horrible en la realidad de lo que fue en tu imaginación.
  • Como la mayor parte de los cuadros sombríos de nuestra imaginación, el cambio resulta más beneficioso que terrible.
La lista siguiente presenta las respuestas más comunes a la pregunta "¿Qué es lo que te preocupa?"


8)     Típicos comportamientos de preocupación en nuestra cultura.

Los denomino "la hoja de la preocupación”. TU LISTA DE PREOCUPACIONES

Yo me preocupo de:

    • Mis hijos.
    • Mi salud.
    • La muerte.
    • Mi trabajo.
    • La economía.
    • Un ataque al corazón.
    • La seguridad.
    • La felicidad de mi marido o mujer.
    • ¿Estaré haciendo bien las cosas?
    • Tener un niño sano si estás embarazada.
    • Precios.
    • Accidentes.
    • Lo que piensan los demás.
    • Mi peso.
    • Dinero.
    • Que se me estropee el coche.
    • Mis cuentas.
    • La muerte de mis padres.
    • Irme al Cielo o ¿qué pasa si no hay Dios?
    • La meteorología.
    • Envejecer.
    • Viajar en avión.
    • La virginidad de mi hija.
    • Hablar en público.
    • Cuando mi cónyuge no me llama.
    • Ir a la ciudad.
    • No tener nada de qué preocuparse. El más neurótico de todos.
  • Para eliminar la preocupación es necesario comprender la razón que la respalda.
  • ¿cuáles son las retribuciones? Las retribuciones son muy similares a los dividendos neuróticos que te proporciona la culpa.

La culpa está enfocada en el pasado; la preocupación en el futuro.
9)     Las retribuciones psicológicas de la preocupación.

  • La preocupación es una actividad del momento presente. De este modo, si gastas tu vida actual inmovilizado por la preocupación que te inspira el futuro, puedes evitar el presente y lo que en él haya de amenaza.
  • Puedes evitar tener que correr riesgos usando tus preocupaciones como excusa para inmovilizarte.
  • Puedes autodenominarte como una persona cariñosa o amante porque te preocupas por los demás.
  • Las preocupaciones son muy útiles para justificar ciertos  comportamientos autofrustrantes.
    • Si eres gordo, seguro que comes de más cuando estás preocupado, por lo que tienes una razón estupenda para aferrarte al comportamiento angustioso producido por las preocupaciones. Este mismo sistema de retribución neurótica es aplicable a otras zonas como el matrimonio, el dinero, la salud y cosas por el estilo.
    • La preocupación te ayuda a evitar el cambio. Es más fácil preocuparse por los dolores que tienes en el pecho que correr el riesgo de averiguar la verdad y consecuentemente tener que habértelas contigo mismo.
  • Las preocupaciones impiden que vivas tu vida.
    • Los angustiados se quedan quietos preocupándose por todo mientras las personas activas y positivas tienen la necesidad de moverse.
    • La preocupación es un recurso muy hábil que sirve para mantenerte inactivo y ciertamente es mucho más fácil angustiarse aunque menos estimulante y agradable, que ser una persona activa comprometida con las cosas.
  • Las preocupaciones pueden provocar úlceras, hipertensión, calambres, dolores de cabeza, dolores de espalda y muchas dolencias por el estilo. Y aunque éstas no parecen retribuciones, obtienen como resultado mucha atención de parte de la demás gente y también mucha autocompasión. Y mucha gente prefiere ser compadecida que realizarse.

10)  Algunas estrategias para eliminar la preocupación

  • Empieza a ver tus momentos presentes como un tiempo para vivir en vez de obsesionarte por el futuro.
    • Cuando te pilles angustiándote, pregúntate a ti mismo: "¿De qué me estoy evadiendo al gastar este momento en preocupaciones?".
    • Entonces empieza a atacar lo que estás evitando o lo que sea que te impulsa a evadirte. El mejor antídoto para la preocupación es la acción.
  • Reconoce lo absurdo que resulta la preocupación.
    • Pregúntate a ti mismo una y otra vez: "¿Habrá algo que llegue a cambiar como resultado de mi preocupación?".
  • Date a ti mismo períodos cada vez más cortos de "tiempos de preocupación".
    • Dedica diez minutos por la mañana y diez por la tarde para preocuparte; considéralos como tus segmentos de preocupación.
      • Usa esos períodos para angustiarte por todos los posibles desastres que te quepan en ese espacio de tiempo.
      • Entonces, usando tu habilidad para controlar tus propios pensamientos, posterga cualquier posible preocupación hasta que te llegue el próximo "tiempo de preocupación".
      • Rápidamente te darás cuenta de lo disparatado que es emplear el tiempo de esta manera y a la larga eliminarás totalmente tu zona de preocupación.
  • Haz una lista de preocupaciones anotando todas las cosas que te preocupaban ayer, la semana pasada e incluso el año pasado.
    • Verifica si tus preocupaciones hicieron algo por ti.
    • Averigua también si algunas de las cosas que te preocupaban llegaron a suceder.
    • Pronto te darás cuenta de que la preocupación es una actividad doblemente inútil y vana. No hace nada para modificar el futuro.
    • Y la posible catástrofe resulta a menudo muy inferior a lo esperado e incluso un hecho beneficioso cuando sucede.
  • Hazte a ti mismo esta pregunta eliminadora de preocupaciones: "¿Qué es lo peor que me puede pasar a mí (o a ellos) y qué posibilidades hay de que ocurran?".
    • Descubrirás de esta manera el absurdo de las preocupaciones.
  • Escoge deliberadamente un comportamiento que esté en conflicto con tus zonas habituales de preocupación.
    • Si eres de los que ahorra compulsivamente para el futuro, preocupándole siempre de si tendrá suficiente dinero para el día de mañana, empieza a usar tu dinero hoy mismo.
  • Empieza a abordar tus miedos con pensamientos y comportamientos productivos.
    • Plantar cara en forma positiva al miedo o la preocupación puede ser la mejor manera de hacerla desaparecer de tu vida.
Ésas son algunas técnicas que te pueden servir para eliminar la preocupación de tu vida. Pero el arma más eficiente que puedes tener para terminar con la preocupación es tu propia determinación de borrar este comportamiento neurótico de tu vida.

11)  Últimos pensamientos sobre la culpa y la preocupación.

  • El momento presente es la clave para comprender tus actividades de culpa y preocupación.
  • Aprende a vivir ahora, en el presente, y a no desperdiciar tus momentos actuales en pensamientos inmovilizantes sobre el pasado o el futuro.
  • No hay otro momento en el que sea posible vivir más que el presente, el ahora, y todas tus preocupaciones y culpas tan inútiles se hacen en el exclusivo momento presente.

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